viernes, 5 de agosto de 2011

Ay ay que miedo

Acabo de llegar a casa después del plan nocturno.
Al abrir la puerta ya me sentí rara.
Entré a oscuras y atravesé el living a tientas, escuché un ruido.
Uh.
¿Qué fue eso?
Me quedé inmóvil para poner atención.
La canilla de la cocina goteaba pausadamente.
La heladera se calmó.
Una ambulancia se alejaba.
El viento estaba moviendo los banderines carnavaleros que colgué en la terraza.
Algún chiflete hizo mover la cortina del baño.
No, nada de todo eso era lo que había escuchado.
Seguía quieta en el medio de la casa sin sacarme el tapado esperando a que se repitiera el sonido.
El techo de madera de mi cuarto crujía tan tétricamente como siempre.
El motor del ascensor se puso en funcionamiento.
Pasó un colectivo haciendo pfffffff con los frenos.
Se movió una bolsa de supermercado que había dejado mal apoyada.
Ladró Frankie, el perro de al lado.
No, no fue nada de eso.
De nuevo el ruido.
Indescifrable.
Como un golpe seco.
¿Qué fue eso?
¿Qué fue eso?
Ay qué miedo la puta madre.
Ay ay ay ay.
¿Quién carajo me manda a mi a vivir sola? 
¿Eh?
¿Qué hago, reviso los rincones?
Ay no no no.
Si encuentro una persona me muero muerta.
Si encuentro una rata me muero muerta.
Si encuentro un fantasma me muero muerta.
Ay que miedo la puta madre.
¿Vino de afuera o de adentro?
Otra vez el ruido, pero más fuerte.
...
Mucho silencio
Y de nuevo.
No es un golpe, ¿qué es?
La puta madre la puta madre la puta madre.
Y de vuelta la nada.
Uh, otra vez.
Y otra y otra y otra,
y otra y otra y otra.
Muy cerca.
Muchos golpes secos.
Alguien va a romper mi pared
y a entrar
y a robarme
y a violarme
y a atarme
y a acuchillarme
y a asesinarme con sadismo.
Grito, ya fue.
No, mejor no.
Llamo a alguien, llamo a alguien,
dónde mierda tengo el celular,
a quién a quién a quién!
El sonido aumentó la frecuencia y el volumen.
Aaaaaaahhhhhhhhhhh.


El ruido seguía.
Se mezcló con una voz grave.
Viene de afuera.
Ah, ok, viene de afuera.
Ah, está medio lejos.
Ah, no, no llamo a nadie.


Pero, ¿qué es?


Y de pronto una mujer y la voz grave, 
en algún lugar fuera del alcance de mi vista pero no de mi oído, 
tuvieron el mejor orgasmo de su vida,
(o por lo menos uno bastante irreal)
y dejaron de mover su cama contra algo.


La puta que los parió.
Cuando les devuelva el favor ya van a ver.
Ya van a ver.

5 comentarios:

Enumerador dijo...

Me hiciste reir! (Te lo digo así porque no quiero escribir "jajaja")

Ah... y perdón por reirme de tus desgracias (?) Será que lo contaste demasiado bien!

Danila dijo...

Excelentisimo.
A mi me pasa lo mimo pero cuando el viento golpe las ventanas disimuladamente.

nastenka dijo...

che, me divierten tus letras.
saludos.
nos estamos leyendo, quizás.-
natasha.

Caribe dijo...

Enumerador: yo también me rio de mis desgracias.

Dani: de una. siempre lindo saber que pasás por acá.

nastenka: nos estamos leyendo. siempre. saludos.

Dicotomínica dijo...

Che... pará boluda!!! re lajate!!! No te van a violar, ni a matarte sadicamente, ni nada... Al final, siempre detrás de todo el miedo, qué hay??? Una pareja que se ama... o no, siempre no...

Relax.