Entré al videoclub. Atrás del mostrador estaba M. Todavía no da para saludarnos con un beso, así que nos limitamos a un hola con el mostrador de por medio.
Hola. Cómo te va. Hace varios días que no venís. Vine pero no estabas, me llevé esta peli, te la devuelvo. Ah, qué peli. No sé, no la vi.
Silencio.
Si hubiera sabido que ibas a llevar esa la no miraba con vos, y te hubiera besado al final, mientras llorabas.
Silencio. Sonrisa. Me puse colorada.
Y en el momento en que estaba por preguntarle a qué hora salía, que si quería hacer algo después, justito ahí entró una chica, y M dejó de comerme con la mirada.
La chica venía en pantuflas, con una cerveza en la mano y dos chops. O sea, esa estrategia es mía nena, pero vos sos mucho más... no sé, más linda. Y agarró una banqueta, se sentó al lado de M, y empezó a hacerse la linda... mientras yo me volvía invisible.
Ah, bueno.
4 comentarios:
Me encantas! Cómo te lo explico mejor?
Listo, leí todo el blog y seguís encantandome.
ja. qué divina.
yo todavía no pude profundizar en tu espacio. ya lo haré. lo prometo.
Jajajaja es lo peor que te pase eso... En especial si el chico es el hermano de tu mejor amiga :P
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